Emotiva celebración del 40º aniversario de la Asociación de Amas de Casa

Se reconoció la labor de dos monitoras: la recientemente fallecida María Teresa Sánchez-Carnerero y María Teresa Ramos de Miguel

La Asociación de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios de Manzanares cumplió cuarenta años y lo celebró por todo lo alto en la tarde del pasado viernes con un emotivo acto en el que, además de reivindicar su importante labor durante estas cuatro décadas, se reconoció el trabajo de dos monitoras y se expuso una pequeña muestra de los productos realizados en sus talleres. El coro de la asociación finalizó la gala con su música.

Mucho ha cambiado la situación de las mujeres en los últimos cuarenta años desde que veinte mujeres se unieran para fundar la Asociación de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios de Manzanares en 1979. Y es que, como recordó la presidenta Margarita García, “en aquellos tiempos había mujeres que no salían de sus casas”.

Durante todos estos años la asociación siempre ha estado al servicio de las mujeres de Manzanares para ofrecerles un lugar para disfrutar de un momento de asueto fuera de casa, para formarse gracias a sus diferentes talleres o para recibir información de trámites y quejas sobre consumo.

Julián Nieva, presente en la celebración de este aniversario, destacó que esta asociación “es la que seguramente más ha hecho en Manzanares por la socialización de las mujeres”. “En aquel momento la rutina diaria de las mujeres era estar en casa, todavía no se habían incorporado como hoy al mercado laboral. Y de alguna manera, la asociación fue una apertura a la libertad que también nos traía la democracia”, señaló.

Además de hacer un breve repaso de la trayectoria de la Asociación de Casa, Consumidores y Usuarios de Manzanares, su junta directiva quiso hacer un reconocimiento a dos de sus monitoras: a María Teresa Ramos de Miguel, “incansable monitora” de los talleres de manualidades, y a María Teresa Sánchez-Carnerero, “persona dedicada en cuerpo y alma a la asociación”. Este último se realizó a título póstumo, ya que la homenajeada falleció unos días antes del evento, por lo que fueron sus hijas las encargadas de recoger la placa y el ramo de flores, momento que tocó la fibra sensible de las personas congregadas en el patio del Mercado Municipal.

La actuación del coro de la asociación puso la nota musical a la celebración, que finalizó con una visita a la exposición con trabajos realizados por las socias en sus talleres durante todos estos años: punto de cruz, pintura al óleo, bolillos, lagartera, pintura en tela, bordado…