El Gobierno de regional reclama máxima prudencia a los ciudadanos a partir del lunes, con las cinco provincias en Fase 1 de desescalada

El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha reclamado máxima prudencia a los ciudadanos de Castilla-La Mancha ante el pase de las tres provincias que habían quedado fuera la semana pasada a Fase 1 de desescalada, como son Ciudad Real, Albacete y Toledo.

“Nos ha costado mucho llegar hasta aquí y no debemos poner a prueba de nuevo al sistema sanitario, que ha respondido”, ha destacado Fernández Sanz, exigiendo máximo cuidado con la higiene, la separación y la movilidad.

“Hemos cumplido con lo exigido por el Ministerio respecto a la capacidad asistencial y cumplimos con el stock de equipos de protección, como la semana pasada, pero hemos dado un paso adelante con el trabajo sobre el diagnóstico precoz de casos”, ha explicado el consejero de Sanidad en su comparecencia de esta tarde.

Así, ha subrayado que hasta ahora los 90 epidemiólogos con los que cuenta la Comunidad Autónoma realizaban el trabajo de rastreo de contactos de los casos confirmados y que ahora 427 profesionales de Enfermería se van a encargar junto a los profesionales de Epidemiología del rastreo de casos sospechosos.

“Esto, unido a una rápida comunicación de los casos, junto al trabajo de todos los profesionales sanitarios y al esfuerzo de la población, ha hecho posible que el lunes toda Castilla-La Mancha esté en Fase 1”, aseguraba Fernández Sanz.

Respecto a las solicitudes realizadas al Gobierno de España, el consejero de Sanidad ha destacado que se ha pedido extremar la vigilancia y el control en el tránsito de población entre provincias, evitando los desplazamientos que no sean imprescindibles.

En este sentido, ha explicado que el año pasado, en el mes de marzo, en Castilla-La Mancha se entregaron 30.000 recetas a ciudadanos de otras comunidades autónomas (15.000 de ellos residentes en Madrid) y este año se han entregado en marzo 182.000 recetas, (153.000 de ellas a ciudadanos de Madrid) y en abril 226.000 recetas, (200.000 de ellas a ciudadanos de Madrid).

“El resultado es escalofriante, por eso exigimos mayor control”, aseguró Fernández Sanz.

En otro orden de cosas, el consejero de Sanidad ha destacado el salto dado en la capacidad diagnóstica, ya que al contrario de lo que había sucedido hasta aquí, que se trataba a los casos en los hospitales, “ahora vamos a buscarlos a través de la Atención Primaria”.

En ese sentido, ha dado a conocer que Castilla-La Mancha dispondrá de un nuevo laboratorio para la realización de PCR, como es el Laboratorio de Sanidad Animal de Talavera de la Reina.

“Gracias a este trabajo de ir a buscar casos, confirmaremos más y tendremos más casos, pero eso no es lo importante, lo esencial es saber cuánto antes si hay más personas afectadas por el COVID-19”, afirmó Fernández Sanz.

“Haber llegado hasta aquí ha costado mucho, seamos todavía más responsables a partir de lunes con la apertura del pequeño comercio, que es esencial en la región”, ha finalizado el responsable de las políticas sanitarias en Castilla-La Mancha.