El acto estuvo presentado por el pregonero del año 2019, Miguel Ángel Bellón
La Hermandad Ferroviaria de los Santos Arcángeles Miguel y Rafael y Divina Pastora iniciaba los actos en honor a su titular con el pregón ofrecido el pasado domingo por Consolación León Arias. Madre, historiadora del arte y partícipe activa de la cultura de Manzanares, la pregonera de la Divina Pastora 2022 pronunció un texto cargado de emoción, en el que no faltaron las referencias históricas y donde la figura de la Virgen fue protagonista.
El acto, celebrado en la ermita de la Divina Pastora, arrancó con las palabras del secretario de la hermandad, Tomás Acosta, que dio la bienvenida a los presentes y celebró que por fin este año el barrio pudiera conmemorar a su titular. Acosta cedió la palabra al pregonero de las fiestas 2019, Miguel Ángel Bellón, natural de Membrilla y muy vinculado a esta barriada, ya que es docente y exdirector del centro educativo Divina Pastora.
Bellón, notablemente emocionado, puso en valor la fe que acompaña a los creyentes en su día a día, sobre todo en momentos complicados como los que nos ha tocado vivir a causa de la pandemia y, particularmente, en su caso personal. “A pesar de los avatares que la vida me ha ido poniendo en este tiempo, tengo que cumplir con el compromiso acordado con esta hermandad y ceder el testigo de esta hermosa tradición que es pregonar las fiestas de la Divina Pastora”, afirmó.
El que fuera pregonero en las últimas fiestas celebradas de la Divina Pastora, fue el encargado de ceder el testigo a su sucesora, Consolación León Arias, a quien definió como “mujer joven, alegre, cercana, carismática y comprometida con la cultura”. Miguel Ángel Bellón destacó de Consoly su educación religiosa y devoción, y enumeró algunas de sus pasiones, como “la escritura, la historia, la música, el arte, la lectura, el cine, el teatro y los viajes”. Asimismo, puso en valor su papel en la vida social y cultural de Manzanares, como colabora habitual del libro guía de la Semana Santa, pregonera de la Virgen de la Paz y presentadora de galas de Sembradores o el encuentro coral ‘Ciudad de Manzanares’.
Tras las palabras de Miguel Ángel Bellón, llegó el momento del pregón con el que daban comenzo las fiestas en honor a la Divina Pastora. Un pregón que Consoly León quiso dedicar, especialmente, a su hijo, Jesús, y a sus padres, Jesús y Consoly, “los pilares de mi vida y quienes más quiero y admiro”; a su hermano Jesús, de quien dijo “siento siempre dentro de mí y me da fuerza para caminar cada día”; a los vecinos del barrio; y al pueblo de Manzanares “mi otra gran familia”, apuntó.
En su discurso inaugural de las fiestas, la pregonera quiso rendir tributo a la Virgen María y a la impronta que, a lo largo de la historia, han dejado aquellos que han sido testigos de su ejemplo: “la grandeza de María está presente a lo largo de la historia (…) es el caso de algunos santos como San Juan Bosco, que nos dice que quien confía en María jamás se sentirá defraudado”.
Citando a algunos de los autores que han dado testimonio de este mensaje, Consoly León destacó los valores que se transmiten a través de la figura de María: “el amor, la fe y devoción que siento por mi madre del cielo, hoy representada en esta bellísima imagen de la Divina Pastora y de su hijo”. Tras pronunciar la Salve en honor a la virgen, la pregonera quiso hacer entrega de su texto a Juan González Elipe, Hermano Mayor de la Divina Pastora.
Siguió este emotivo pregón con un recorrido por su infancia, su educación basada en el carisma vicenciano de las Hijas de la Caridad, en el colegio de La Milagrosa y aquellos recuerdos del “olor a flores” en el mes de María. Asimismo, repasó la tradición del barrio y su vinculación con la imagen de su titular; puso en valor la gran devoción que le profesan sus fieles, y que se traduce en las fiestas que Consoly León inauguraba, como manda la tradición, con un “viva la Divina Pastora”.
